Una maravilla de la técnica y otro exponente del reconocido perfeccionismo surcoreano, amén de otra demostración del saber hacer de HiFi ROSE en su búsqueda incesante del sonido absoluto. Definido por sus creadores con el elocuente calificativo “Absolute True Fidelity DAC”, el RD160 es una estilizada electrónica que sobresale por el increíble nivel de refinamiento de la ingeniería que incorpora, con la finalidad de llevar a su máxima expresión la conversión de señales digitales de audio al dominio analógico y el suculento añadido de un precio sin competencia en el ámbito del High End más exclusivo. La primera solución digna de mención es el módulo ROSE DPC (“Digital Processing Core”), en el que todos los bloques de procesado están concebidos a fin de mantener una precisión óptima y garantizar así un sonido extraordinariamente natural. En concreto, sincroniza con una exactitud sin precedentes los contenidos entrantes mediante un reloj OXCO (“Oven-Controlled Crystal Oscillator”) de alta precisión, que los formatea en I2S, resultando particularmente útil con las “Hi-Res”, al aplicarles procesos de sincronización y enganche con el objetivo de minimizar el “jitter”.
Además, el circuito encargado de configurar y gestionar la interfaz de usuario está completamente aislado del trayecto recorrido por la señal digital de audio, eliminando por completo distorsiones e interferencias en la misma. El segundo elemento tecnológico clave del RD160 es la denominada ROSE CIM (“Completely Isolated & Moduled”) Architecture, una topología concebida para maximizar la calidad sonora vía estructura modular estricta. En concreto, el DAC del HiFi ROSE emplea un esquema basado en dos “chips”, encargándose el primero de ellos, un AK4191, de las etapas de filtrado (es posible elegir entre 6 filtros) y la conversión delta-sigma inicial, mientras que el segundo, un AK4499EX, se encarga de la conversión al dominio analógico. Al separar los bloques analógicos y digitales, se consigue un aislamiento perfecto frente al ruido durante de las tareas realizadas por cada sección, una relación señal/ruido extremadamente alta y una musicalidad extraordinaria. Además, al asignarse DAC individuales por canal y utilizarse una arquitectura simétrica totalmente balanceada para la etapa de salida analógica, el RD160 exhibe una gama dinámica sobresaliente y reproduce con precisión milimétrica las sutilezas de las distintas grabaciones, complementándose con una imagen estereofónica clara y precisa.
Otra característica relevante de esta exquisita electrónica es el ROSE NRA (“Noise Reduction Analog”) Filter, integrado en la etapa analógica con el objetivo de lograr una respuesta en frecuencia plana que abarque la octava inferior del espectro, con la correspondiente ausencia de caídas en dicha respuesta y, por lo tanto, una restitución sin limitaciones desde el extremo grave hasta los detalles de ambiente situados en la gama de frecuencias altas. Lógicamente, ejecutar estas impresionantes funcionalidades sin limitaciones implica que la pertinente alimentación debe estar completamente libre de impurezas. Y, en efecto, así es, gracias a tres fuentes de alimentación lineales de ruido ultra-bajo hechas a medida, que suministran energía a la etapa digital de entrada y a las etapas analógicas de salida izquierda y derecha, reduciéndose de manera drástica las interferencias y la diafonía entre las mismas. A consecuencia de esta configuración, el RD160 lleva a increíbles cotas de excelencia la claridad y la dinámica, ofreciendo una experiencia de escucha profundamente inmersiva. El HiFi ROSE se completa con una construcción del máximo nivel, una estética rompedora acorde con la reputación de la marca y una conectividad muy generosa (con dos entradas de sincronismo externo incluidas) que satisfará las necesidades de los consumidores y equipos particularmente exigentes.